En México, al igual que en muchos países, el envejecimiento demográfico no es reversible pues los adultos mayores de mañana ya nacieron. Las generaciones más numerosas, las nacidas entre 1960 y 1980, ingresarán al grupo de 60 años y más a partir de 2020. Esto se refleja en el aumento de las proporciones de adultos mayores en las próximas décadas. En el año 2000, la proporción de adultos mayores fue de 7% aproximadamente; se estima que este porcentaje se incremente a 12.5% en 2020 y a 28.0% en 2050. Según proyecciones del Consejo Nacional de Población de México (Conapo, 1999), la población de 65 años o más, en números absolutos, pasará de 5’392,650 en 2005 a 11’553,176 en 2025.